La filosofía de Aristóteles está muy influida por su observación de la naturaleza, y sobre todo de los fenómenos biológicos. Uno puede observar como un gusano se transforma en una mariposa, o como una semilla pequeña se transforma en un enorme árbol. La cuestión para Aristóteles es ¿qué queda a pesar del cambio? Y su respuesta es un término que él mismo acuñó: la Sustancia.
En una frase como “yo soy un hombre”, Aristóteles diferencia entre la Sustancia que soy yo y lo que se predica de la Sustancia: un hombre. A todo lo que es individual, único lo llama Sustancia Primera, a lo que se puede predicar de esta lo llama Sustancia Segunda, o sea, el género, la especie, etc. Por último tenemos características que se pueden afirmar de una sustancia pero no son necesarias, como por ejemplo ser alto o bajo, o tener la piel morena o clara, a estas características las llama Accidentes.
Todo esto viene a cuento de Shrek. Porque él y su esposa Fiona se pelean por Sustancias y Accidentes. Shrek se lleva mal con su suegro y Fiona no sabe que hacer para arreglarlo, así que se enfada con Shrek. Le grita que él es un ogro, y Shrek se siente más herido de lo que ella esperaba ¿por qué? Porque Shrek es un ogro, no es un ser humano. Ella nombró al Accidente, es decir lo llamó ogro porque se comportó mal, pero él entendió que Fiona no aceptaba su naturaleza (o según Aristóteles, no aceptó su Sustancia). Por eso Shrek busca un hechizo para transformarse y dejar de ser un ogro, sin darse cuenta de que Fiona sólo quiere que cambie sus modales.
Cuando Fiona descubre que Shrek se ha convertido en un ser humano su problema sigue siendo aristotélico. Ella sabe que él es un hombre, pero eso no quiere decir que le valga cualquier hombre (Sustancia Segunda), ella ama a un solo hombre que se llama Shrek (Sustancia Primera). Digamos que aunque el hechizo ha operado una transformación, ella necesita descubrir al individuo real que subyace detrás de esa transformación. Ella ama una semilla y quiere seguir con el árbol que nace de esa semilla, no con otro árbol.
Peter Parker tiene dos Sustancias Segundas, es un hombre despistado y a la vez es un superhombre. Esta dualidad lo trae loco. Peter Parker lo pasa muy mal porque no puede cumplir con ninguna cita. En cambio, para Mary Jane no hay ningún problema, sabe que le gustan los dos sujetos. Mary Jane, igual que Fiona reconoce al individuo por encima del disfraz porque el amor es, digamos, el sentimiento que nos permite llegar a la esencia del otro, a su Sustancia Primera.
Por el contrario, cuando el amor fracasa, solemos decir “ya no eres el mismo” o bien “ ya no eres la misma”. No aludimos a la especie, no se trata de que la persona se ha ya transformado en chimpancé o en un televisor, se trata de que ya no la vemos como el mismo individuo. Aristóteles diría que ya no es para nosotros la misma Sustancia Primera.
0 comentarios:
Publicar un comentario