Sin City

Robert Rodriguez & Frank Miller, con la colaboración especial de Quentin Tarantino.
Reparto: Jessica Alba (Nancy), Benicio Del Toro (Jackie Boy), Brittany Murphy (Shellie), Clive Owen (Dwight), Mickey Rourke (Marv), Bruce Willis (Hartigan), Elijah Wood (Kevin), Rosario Dawson (Gail), Michael Clarke Duncan (Manute), Michael Madsen (Bob), Josh Hartnett (El Hombre), Carla Gugino (Lucille), Jaime King (Goldie), Nick Stahl (Roarke Jr/Bastardo amarillo), Devon Aoki (Miho), Alexis Bledel (Becky), Rutger Hauer (Cardenal Roark).
Guión: Frank Miller; basado en sus cómics.
* * *
Los héroes de Miller

Sin City se inspira, por no decir, calca, un tebeo de Frank Miller hecho en tinta negra, sin color, por eso, supongo, está rodada en blanco y negro. Algunos objetos, sin embargo están pintados, como los ojos azules de una de las prostitutas, o el amarillo hepático de la piel del malo. El detalle es fácil de conseguir en un tebeo, pero en el cine supone el trabajo de colorear fotograma a fotograma. Robert Rodríguez no se ha resisitido a la tentación de hacer su estilo visible. Es lo mismo que le pasa a los millonarios que decoran su casa en estilo rústico, necesitan dejar alguna etiqueta que enseñe a las visitas la burrada que le ha costado esa decoración sencilla.

La otra influencia que ha tenido el tebeo ha sido la voz en off, un elemento narrativo execrado por entendidos y aficionados, pero necesario para trasladar el estilo en forma de viñetas con texto, y no con bocadillos.

Del resultado final creo que todo el mérito es de Miller, no de los actores ni del director. Los héroes de Miller tienen todo el pathos de los héroes orientales: su machismo desmelenado les lleva a cualquier parte para vengar a una mujer. Su necesidad de venganza justifica orgías de violencia. Bruce Willis hace de Hartigan, un policía que sólo vive para salvar a una niña de ser violada, Mikey Rourke es Marv, un matón sin inteligencia y tan feo que las prostitutas no se van con él ni por dinero; una prostituta bellísima le regala una noche de amor y desde entonces sólo vive para vengarla. Hay algo en ambos que les hace trascender, quizá el desprecio que sienten por la propia vida.

Los malos están escondidos en las entrañas de la alta sociedad como exigen las reglas del género negro. Hay quien da saltos de alegría cuando ve este tipo de ficción. Hay espectadores que se ponen la mar de contentos cuando ven sentarse en el banquillo a un magnate o a un obispo, o a la policía.

Francisco Marinero ****: Todas las superproducciones basadas en tebeos de superhéroes —como 'Camino a la perdición', la propuesta más cercana a 'Sin City'— son adaptaciones que han tratado de magnificar la espectacularidad de los dibujos, de darles cierta verosimilitud aunque obviamente ilusoria y momentánea y de enriquecer a los personajes con los rasgos de actores célebres o expresivos. Es decir, se trata de perfeccionar los cómics con recursos cinematográficos.
A la inversa, Rodríguez se propone perfeccionar el cine clásico de serie negra con recursos del cómic: imaginación sin ningún tipo de limitaciones, caracterización de los personajes sólo por su físico, renuncia a toda ilusión de verosimilitud, estilización al máximo.


Rotten Tomatoes: $78 78%

La isla

Michael Bay, 2005
Reparto: Ewan McGregor (Lincoln Eco-Seis/Tom Lincoln), Scarlett Johansson (Jordan Delta-Dos/Sarah Jordan), Djimon Hounsou (Albert Laurent), Sean Bean (Merrick), Steve Buscemi (McCord), Michael Clarke Duncan (Starkweather), Ethan Phillips (Jones Eco-Tres), Brian Stepanek (Gandu Alfa-Tres), Siobhan Flynn (Lima Alfa-Uno), Max Baker (Carnes).
* * *
Originales y copias

De las tres partes de la película, la primera es la que Michael Bay dirige con menos convicción. “La isla” empieza como una intriga futurista. Los pocos supervivientes de La Tierra se encierran en una forzaleza a la espera de su turno para ir a La isla, el único refugio no contaminado que queda. Pero Lincoln se hace preguntas igual que el Neo de Matrix, algo no encaja.

La segunda parte es de presencia obligada para que el productor arriesgue sus dólares, y el espectador los suyos. Una huida llena de pirotecnia, persecuciones y carreras que demuestra la solvencia del director, al margen de lo que uno pueda decir de su talento.

Hay muchas obras como esta que se quedan en meros intercambios de frases y fotos fijas, sólo aptas como terapia de sueño, por ejemplo la famosa “Fuga de Logan”. La intención de las carreras de autos y los disparos es darnos la sensación de movimiento, de que algo puede cambiar según lo que hagan o arriesguen los personajes. Sin embargo no es tanto el movimiento en juego. Uno tiene la sensación de estar asistiendo a una pequeña clase de ética. La pregunta podría ser ¿está bien copiar un ser humano para salvar una vida? De acuerdo ¿y que ocurre si tú eres la copia? El cine le gana al discurso en algunos de sus mecanismos, el cine no funciona con razones, sino con sinergias. Uno puede identificarse con el original, o con la copia, y el mejor momento de la película es cuando no sabemos cual es cual.
Rotten Tomatoes: 40% $31m.
top