Dirección y guión: Nancy Meyers, 2003
Reparto: Jack Nicholson (Harry Sanborn), Diane Keaton (Erica Barry), Keanu Reeves (Dr. Julian Mercer), Amanda Peet (Marin), Frances McDormand (Zoe), Jon Favreau (Leo), Paul Michael Glaser (David Klein), Rachel Ticotin (Dra. Martinez), Kadee Strickland (Kristen).
* *
Un par de poemas y un montón de tópicosReparto: Jack Nicholson (Harry Sanborn), Diane Keaton (Erica Barry), Keanu Reeves (Dr. Julian Mercer), Amanda Peet (Marin), Frances McDormand (Zoe), Jon Favreau (Leo), Paul Michael Glaser (David Klein), Rachel Ticotin (Dra. Martinez), Kadee Strickland (Kristen).
* *
Nancy Meyers ha asumido la noble tarea de volver con su cine a todos los tópicos y generalizaciones de nuestra época sin sentir ningún rubor. Ya se dedicó con “¿En qué piensan las mujeres?” a discutir sobre quien es mejor en el trabajo, si hombres o mujeres. No contenta con el resultado ha rodado esta otra para decirnos que los hombres no quieren comprometerse y que el amor no tiene edad. Ya sólo le falta rodar una para decir que hay que vivir que la vida son dos días y otra para convencernos de que el amor de una madre es lo más grande que hay.
Jack Nicholson interpreta a un hombre maduro, que a los 63 años (se quita cuatro) anda siempre con jovencitas menores de 30. Su última conquista lo lleva a la casa de la playa de su madre, que no es otra que Diane Keaton. Él sufre un infarto y tiene que quedarse allí unos días, y el drama gira en torno a si se fijará o no se fijará en una mujer de una edad acorde con la suya, y sobre todo trata de si alguien puede o no puede ponerle las esposas a este solterón empedernido que prefiere pasárselo bien.
Diane Keaton interpreta a Erica Barry que es una escritora de teatro madura que nos hará pensar en qué línea de belleza usa para conservarse tan joven antes que en qué escuela de interpretación fue la suya. El personaje de Erica utiliza la vida real para escribir sus dramas, de modo que las personas que la conocen se sienten heridas porque saben que aparecen aludidas, como le ocrurría a Woody Allen en un par de películas ("Desmontando a Harry" creo que era una de ellas). Cuando veo este tema no me quito una idea de la cabeza, si el personaje de la obra de teatro tiene detrás a una persona, los personajes de la película tienen también a personas reales que representan. Y sobre todo me planteo, ¿por qué tiene que utilizarme a mi Nancy Meyers de testigo de sus dramas personales? No sé si me explico.
Lo más gracioso, sin duda son los chistes que hace Nicholson con su edad, y con la viagra que explica la vida que lleva. Pero a la película también le queda espacio para hacer un par de poemas. Los dos amantes de la película son insomnes, hasta que duermen juntos. Eso es poético, la biología es mejor que ninguna frase bonita que se puedan largar el uno al otro.
Erica colecciona guijarros de la playa, y Harry le hace ver que sólo coge los blancos. Así que le regala uno negro, que ella guarda con los otros. De despedida ella le regala un frasco de guijarros negros, pero hay uno blanco. Bonito ¿no? Los guijarros también son mejores que las palabras, vienen a significar largas horas que uno pasa caminando y pensando hasta que se encuentra uno.
Enrique Colmena * | Méndez-Leite @@@@ | Ebert ***1/2
Rotten tomatoes: 70%. Fresh: 101 Rotten: 44
Taquilla 16ª semana: $119 mill
Rotten tomatoes: 70%. Fresh: 101 Rotten: 44
Taquilla 16ª semana: $119 mill
0 comentarios:
Publicar un comentario